Él, él, él...

jueves, 6 de octubre de 2011

Te extraño.

No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. Cuánta razón tiene esta frase. Cuando te perdí, entendí que hay que    
apreciar lo que tienes, y no solo estar segura de que no lo vas a perder nunca. Por que nada es para siempre, aun que yo cometí un grave error pensando que siempre vas a estar conmigo, me ilusioné demasiado y ahora me arrepiento.
Yo era realmente feliz estando contigo, y eso te lo tengo que agradecer toda la vida. Contigo aprendí a amar. Tú me hiciste mas fuerte. Tú me hiciste sonreír, tú me hiciste saber de que el amor verdadero existe y no solo es un cuento. Y esas cosas nunca las voy a olvidar. 
Pero es que recordarlas me duele, porque sé que ya no estás conmigo, ahora estás haciendo feliz a otra persona. 
Me duele porque echo de menos nuestras conversaciones tontas...
-Te quiero.
-Yo más.
-No yo :)
Echo de menos tus besos, el tacto de tu piel, tu sonrisa, tus ojos que brillaban cuando me mirabas, tu mirada dulce, llena de amor, tu pelo suave que me gustaba tanto. Me encantaban los mensajes que me mandabas, decías que nunca vas a querer a nadie como me quieres a mi. Me encantaba cuando te comportabas como un niño pequeño, que jugabas conmigo. Me encantaba cuando me consolabas porque yo estaba mal. Y ahora ya no tengo a nadie que se comporte así conmigo. Y por eso te extraño. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario